La evolución del cine llevaba unos cuantos años estancada. Desde su creación en blanco y negro pasamos al cine sonoro con diálogos integrados, luego llegó el color y con ello el cine de animación. Este último ha evolucionado muchísimo con el paso de los años, pero con Spider-Man: Un nuevo universo hemos dado un gran paso hacia adelante. Se la han jugado y hecho una gran apuesta para ganarse a la audiencia tanto joven como adulta con un estilo totalmente nuevo.
Un nuevo universo para el cine
Hollywood firmó un contrato con Marvel del que se ha estado aprovechando durante los últimos 10 años con historias alucinantes que culminarán con el desenlace de Infinity War. ¿Pero qué podemos esperar cuando todo esto termine? Seguramente muchos superhéroes aparecerán de debajo de las piedras con un formato que aspirará a conseguir lo mismo (y seguramente no lo consigan dado el listón alto que ha dejado Marvel).
Por otro lado, tenemos DC, la otra franquicia de superhéroes que no ha tenido tanto éxito con su Liga de la Justicia. Lo curioso de este caso es el éxito que ha tenido en formatos de animación como la Lego película que tras su éxito con el personaje de Batman derivó en una nueva peli del murciélago de Gotham en Lego y en solitario. La innovación fue la sátira y el gamberrismo de este personaje tan serio y aterrador.
La mezcla de estos dos fenómenos es lo que ha provocado el cambio del que hablábamos y del que podemos ser testigos en una nueva aventura del hombre araña. En esta ocasión encontramos la combinación perfecta del cómic y el cine en un híbrido donde predomina el estilo de la cultura pop, la inserción de las propias viñetas y onomatopeyas en la película, unos frames con una textura de líneas, bordes y puntos propias de un cómic o un grafiti. Si además de esto añadimos un guion bien estructurado con este punto de gamberrismo juvenil, una estética urbana junto con una banda sonora propia del hip-hop, obtenemos una película totalmente nueva a todo lo que hemos visto hasta ahora.
Un nuevo universo para Spider-Man
Será que no conocemos suficiente la historia de Spider-Man, ¿verdad? No hemos tenido suficiente tras una trilogía, dos pelis de Amazing y una de Homecoming. Salvo la última, a mi parecer, ninguna estaba a la altura y cuando vi esta nueva entrega de animación anunciada en cartelera no esperaba demasiado. “¿Qué más nos pueden ofrecer de este superhéroe?”, fue lo que pensé. Cuando salí del cine pensé: comienza una nueva era del cine y que nunca había visto al hombre araña desde este punto de vista.
Debe de ser la peli más divertida que he visto de Spider-Man y además fue una grata sorpresa descubrir a los personajes de esta historia. Nada más comenzar ya creía que la película prácticamente había terminado. Ocurre algo que te hace esperar cualquier cosa de la historia y la verdad es que tienen carta blanca para hacer lo que sea.
En este caso Peter Parker no es el protagonista. Conocemos a Miles, un joven hispano de instituto con mucha energía y la necesidad de expresarse a través de su arte con el espray de pintura. El destino hace que le pique una de esas dichosas arañas radioactivas que rondan por NY y le otorga unos poderes diferentes a los que estamos acostumbrados. Buscando respuestas descubre a Kingpin, el malo por excelencia de Spider-Man, intentando abrir una brecha entre varias dimensiones mientras el auténtico Spider-Man intenta impedírselo. Por una serie de razones que no explicaremos varias versiones del superhéroe se reúnen en la dimensión de Miles y juntos le echarán una mano para controlar sus poderes y pararle los pies a Kingpin.
Más universos por favor
Que no se detengan. Que sigan por este camino porque es la forma de que la gente siga yendo al cine y salga completamente satisfecha. En mi caso me alegró ver algo nuevo a lo que me tiene acostumbrado. Es bueno innovar con el guion, pero hay más cosas que se pueden mejorar en la forma con la que contamos las historias. Especialmente cuando el público es joven y los protagonistas son superhéroes.
Que no os asuste este este nuevo formato. Darle una oportunidad porque estoy convencido de que os puede gustar mucho. No importa la edad que tengáis porque se trata de una historia y un formato que puede gustar a todos los públicos.
Como decía al principio, espero que el cine siga evolucionando por nuevos caminos como es el caso de Spider-Man: Un nuevo universo.