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‘Mommy Dead and Dearest’: La horrible historia de Gypsy Rose y Dee Dee Blanchard

Hace ya años que HBO se ha consolidado como una de las principales plataforma de documentales en España, pero en su catálogo hay uno especialmente polémico; el de “Mommy Dead and Dearest”.

El reportaje indaga en el asesinato de Dee Dee Blanchard y de la trágica vida de su hija adolescente Gypsy Rose. Además, el documental habla abiertamente del síndrome de Münchhausen por poder, una extraña patología psiquiátrica que lleva a los cuidadores a enfermar a sus pacientes/víctimas para que necesiten cada vez más y más asistencia.

“Mommy Dead and the Dearest” es un documental producido por HBO, estrenado en 2017 y dirigido por Erin Lee Carr, conocida por dirigir otros interesantes documentales de ‘true crime’ como “Te quiero, muérete” y “Dr. Nassar: el caso del equipo de Gimnasia de EE. UU”.

Si has visto el documental y te has quedado con ganas de más, escucha nuestro podcast de ‘Las Culturetas’ en el que comentamos más en profundidad los grandes momentos que nos ha dejado “Mommy Dead and the Dearest” y del caso en general.

¿Quieres indagar más en este caso? Puedes escuchar el episodio de Podcast que ‘Las Culturetas’ le dedicamos, comentando el documental en sí y cómo este trata el caso, además de otras curiosidades.

Si lo prefieres, puedes seguir leyendo y enterarte de más:

¿Quién es Gypsy Blanchard?

Gypsy nació en LaFourche Parish – Louisiana, hija de Dee Dee y Rob Blanchard, en 1991. A los tres meses de edad, Dee Dee afirmó que la bebé sufría de apnea de sueño, por lo que tendría que dormir conectada a una máquina. A los ocho años, alegó que la niña sufría de leucemia y distrofia muscular, por lo que debía ser alimentada mediante un tubo y usar continuamente una silla de ruedas. Además de estas enfermedades, según Dee Dee, Gypsy sufría de ataques epilépticos, asma, problemas de oído y vista y tomaba numerosas medicinas. Debido a todas estas patologías, se le tuvieron que practicar múltiples cirugías, se le tuvieron que extraer las glándulas salivares y los dientes ya que los tenía podridos. Con todas estas dolencias, Dee Dee decía que Gypsy no tendría una esperanza de vida superior a los 18 años.

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¿Y quién es Dee Dee Blanchard?

Dee Dee Blanchard nació en Louisiana en 1967, en una clásica familia sureña de Estados Unidos. A los 24 años se quedó embarazada de Rob Blanchard, su novio de 17 años de edad con quien se casó después de la noticia. Tras dar a luz a Gypsy Rose, Rob pidió el divorcio por lo que Dee Dee se dedicó por completo a los cuidados de su hija enferma dejando de lado su trabajo como ayudante de enfermería.

Madre e hija sufrieron varias calamidades, incluso fueron damnificadas por el huracán Katrina en 2005 en el que perdieron su casa y posesiones, entre ellas la partida de nacimiento y el historial médico de Gypsy. Así es como la fundación ‘Habitat for Humanity’ les construyó una pequeña casa con todas las comodidades en Springfield, Misuri. Entonces, la devota y dulce madre soltera y su hija pequeña con múltiples diversidades funcionales se convirtieron en el centro de atención de la localidad, y eran apoyadas económicamente por los vecinos y diferentes ONGs como la Fundación Ronald McDonald y la Fundación Make-A-Wish.

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El 14 de junio de 2015, Dee Dee fue encontrada asesinada a cuchillazos en su cama. Además, no había ni rastro de Gypsy, su hija adolescente pero con edad mental de 7 años, a la que se le creyó muerta o secuestrada, ya que habían dejado todas las medicinas en la residencia y la silla de ruedas que necesitaba para moverse. Al día siguiente, la policía encontró a Gypsy en Wisconsin junto a su novio Nicholas Godejohn. Según declararon los policías, Gypsy fue reconocida como una adulta (tenía 23 años) que no tenía ningún tipo de discapacidad física o psíquica e involucrada en el asesinato de su madre. Las investigaciones concluyeron que Gypsy no tenía ninguna enfermedad y que Dee Dee sufría del síndrome de Münchhausen por poderes.

¿Qué es el síndrome de Münchhausen por poderes?

La realidad es que Gypsy podía caminar, no necesitaba ser alimentada por un tubo y no tenía cáncer. Cuando los policías la encontraron, su pelo había crecido bastante porque era su madre quien le afeitaba la cabeza. Por esto se le diagnosticó a Dee Dee, póstumamente, la enfermedad mental conocida como síndrome de Münchhausen por poderes, por la que se inventaba los síntomas de su hija para recibir la atención y simpatía de los demás por ser una cariñosa y abnegada madre. Dee Dee tenía formación de enfermería, por lo que conocía acerca de los síntomas y procedimientos médicos. Además, contaba con un gran poder de persuasión, ya que convencía a los doctores de que le hicieran pruebas muy costosas que casi nunca se hacen a demanda, como tomografías, ecografías, escáneres y cirugías.

Cuando Gypsy se hizo mayor para poder comunicarse, Dee Dee le prohibía hablar durante las citas médicas e incluso desarrolló un lenguaje para cuando estaban en presencia de otros. En todas las imágenes se puede ver a madre e hija agarradas de la mano; así, si Gypsy decía algo fuera del guión o demostraba sus verdaderas capacidades mentales, la madre le apretaba fuerte la mano y, una vez estaban solas, Dee Dee la golpeaba fuertemente con cables, perchas de ropa o cinturones.

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A pesar de que Gypsy era una adulta, continuaba sufriendo abusos de su madre, quien controlaba absolutamente todos los ámbitos su vida. No obstante, Gypsy empezó a tener curiosidad sexual y además seguía queriendo hacer realidad su sueño de tener una vida de película; quería conocer a un príncipe, casarse y formar una familia como lo hacen las princesas Disney. Por eso se apuntó a un sitio web de citas cristianas donde conoció a Nicholas Godejohn, a quién contó la verdad acerca de su madre y le pidió que la ayudara (a deshacerse de ella).

¿Quién es Nicholas Godejohn?

Nicholas ‘Nick’ Godejohn nació en Big Bend, Wisconsin, en 1989. Desde pequeña edad fue diagnosticado con autismo, síndrome de Asperger y bajo cociente intelectual. En 2013 la policía lo detuvo por masturbarse en un Mcdonalds mientras veía una película porno. También le levantaron cargos  por posesión de arma blanca.

Nick sufrió bulling en el colegio y no tuvo muchos amigos por lo que se refugiaba en Internet. Mantuvo una relación online con Gypsy por más de un año, y al principio era una relación más romántica pero cada vez fue tornándose más sexual. Nick había sido diagnosticado con personalidad múltiple y le pidió a Gypsy que “creara” una novia para cada una de las personalidades, todas sumisas e interesadas en BDSM. Gypsy habla abiertamente con Nick y le pidió que la liberara de los maltratos de su madre con lo que llamaron “Plan B”; su asesinato.

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El asesinato de Dee Dee Blanchard

En junio de 2015, ambos llevaron a cabo el plan que consistía en que Gypsy dejara la puerta trasera abierta y se escondiera en el lavabo. Nick, entonces, entraría en casa, apuñalaría a Dee Dee y los dos escaparían juntos. Y así fue. La pareja viajó al día siguiente a la casa de la familia de Nick en Wisconsin. Desde allí postearon en la cuenta de Facebook que compartían Gypsy y Dee Dee: “La perra está muerta”, y dentro de los comentarios añadieron: “Apuñalé a esa puta gorda y violé a su dulce e inocente hija. Su grito fue tan jodidamente fuerte. Lol”. Por lo que, obviamente, sus seguidores alertaron a la policía y la descubrieron muerta en su domicilio. Gypsy, más tarde, confirmó que publicó esos mensajes para que encontraran el cuerpo de Dee Dee y pudiera recibir un entierro adecuado.

Nadie entendía cómo le pudieron hacer eso a “la dulce Dee Dee”, y estaban preocupados por la integridad de Gypsy. Así que una vecina y amiga de Gypsy le comentó a la policía acerca del novio online que tenía diciendo que estaba preocupada. La policía, entonces, consiguió la dirección IP del post de Facebook y pudieron rastrear su dirección de Wisconsin. Mientras tanto, unos días después del asesinato, llega un paquete a casa de los padres de Nick y dentro está el cuchillo que utilizó para cometer el asesinato junto con 5000 dólares de ahorros que tenía Dee Dee en casa. Con esto unido a que habían tenido todas las conversaciones vía SMS, fue muy fácil saber que eran culpables.

El juicio de Gypsy Rose y Nick Godejohn

Al principio, Gypsy lo negaba todo y seguía en su rol de “niña inocente”, pero durante el juicio todos los detalles salen a la luz.

El 5 de julio de 2016, Gypsy se declaró culpable de asesinar a Dee Dee y fue sentenciada a diez años de prisión por asesinato en segundo grado. En la sentencia, el fiscal Dan Patterson señaló las circunstancias “extraordinarias e inusuales” del caso que si bien creía que podría haber obtenido una condena por asesinato en primer grado, que puede conllevar la pena de muerte o la vida sin libertad condicional en el estado de Misuri, no creía que fuera justo dado el abuso que Gypsy había sufrido. El médico experto en Münchhausen afirma que el control que ejercía Dee Dee sobre Gypsy era tan grande como el de una persona secuestrada, y que de cierta forma se justifica el asesinato porque era la rehén de su madre tratando de escapar.

A diferencia de Gypsy, Nick admite prácticamente en seguida que asesinó a Dee Dee. En los interrogatorios iniciales afirma: “La verdad es… Ok, lo admito, yo apuñalé a su madre.” Dos años más tarde, en Noviembre de 2018, Nicholas Godejohn fue declarado culpable de asesinato en primer grado después de un juicio de cuatro días, durante el cual Gypsy testificó que el plan para matar a Dee Dee lo empezó ella.

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Gypsy también habló sobre el papel de “maestro y esclavo” que ella y Godejohn asumieron dentro de su relación. Ella testificó que Godejohn dijo que quería violar a Dee Dee la noche del asesinato, y que ella se ofreció en lugar de su madre. En 2019, Nick fue sentenciado a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional por asesinato en primer grado y una sentencia concurrente de 25 años por cargos de acción criminal armada.

En la actualidad, Godejohn desde la prisión afirma: “Gypsy fue la mente maestra tras el asesinato, ella prácticamente me contrató como sicario a su manera”. El joven también afirma que la razón por lo que lo hizo es porque estaba cegado por el amor hacía ella y que aún está muy enamorado.

Por su parte, Gypsy está saludable y sigue un régimen médico para curarle de todos los males que se “inventó” su madre. En el centro correccional donde cumple condena recibe un tratamiento psiquiátrico para tratarle el estrés postraumático y declara que no se alegra de la muerte de su madre, pero que sí se siente más libre que nunca aunque esté en prisión. En 2019, Gypsy anunció vía Instagram que estaba comprometida con Ken, un amigo por correspondencia que se puso en contacto con ella después de verla en el documental de HBO.

Más allá de la verdadera historia

La historia de Dee Dee y Gypsy (y Nick) ha dado la vuelta al mundo, y por razones obvias y lo dramático del caso, no solo se ha hecho un documental sobre esta sino que en marzo de 2020 se estrenó ‘The Act’, una miniserie que trata la parte de la historia en la que Gypsy se da cuenta de que está siendo una víctima de su propia madre.

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La serie, producida por Hulu y protagonizada por Joey King y Patricia Arquette, con actores secundarios de la talla de Chloë Sevigny, es un thriller basado en la historia real, centrándose en el personaje de Dee Dee y añadiéndole tintes de film de terror.

El síndrome de Münchhausen por poder en la pequeña pantalla

No es la primera vez que este tipo de enfermedad es protagonista de alguna serie, sin ir más lejos, la maravilla de la HBO ‘Sharp Objects’ o ‘Heridas abiertas’ es un buen ejemplo.

La miniserie está basada en el libro del mismo nombre, de la autora Gillian Flyyn (que ha escrito otras joyas como ‘Gone Girl’, a.k.a. ‘Perdida’), y muestra la historia de Camille, una torturada reportera que vuelve a su pueblo natal para cubrir un caso de asesinatos de niñas. Y es que aquí hay dos historias paralelas; el misterio macabro que está horrorizando a todos los vecinos, y la relación con Camille y su madre, y el recuerdo de su hermana Marian, que estuvo enferma toda la vida y finalmente murió muy joven (alerta Münchhausen).

La historia retrata muy bien esta enfermedad mental, y las consecuencias que esta puede tener en la vida de las víctimas de quienes la padecen.

¿Crees que Dee Dee hubiese matado a Gypsy? ¿Es Gypsy una manipuladora profesional? ¿Conocías el síndrome de Münchhausen por poder? ¡Déjanos un comentario!